

La falta de agua en amplias zonas del ejido urbano zapalino genero airados reclamos de la comunidad y un pedido de explicaciones tanto al ejecutivo municipal como a Ente de Provisión del servicio.
Durante los meses de enero y febrero, los barrios del alto se vieron fuertemente perjudicados por la ausencia de obras para mejorar la captación y el almacenamiento del recurso hídrico, generando trastornos de diversa índole. La actualización tarifaria que cada año impulsa el EAMSEP implica el detalle de las obras a realizarse, cuya falencia se vio plasmada en el caluroso verano en la zona centro. A raíz de la crisis, el Intendente Koopmann solicito la realización de una sesión extraordinaria al Concejo Deliberante local con el objeto de eximir a los usuarios perjudicados del pago del servicio en las facturas de los meses mencionados.
Zapala se abastece de agua mediante sistemas de captación y filtrado de las aguas provenientes del acuífero subterráneo, rio bajo tierra cuya calidad y pureza son superiores a la media de cualquier localidad neuquina, con excepción de Santo Tomas donde literalmente se abastece de agua mineral.
Concejales de la localidad solicitaron informes al ente de servicios a fin de evaluar los pasos a seguir. En tanto que vecinalistas han expresado enérgicamente la exigencia de un plan de obras e infraestructura que resuelva la situación. “Zapala es una ciudad en permanente crecimiento y geográficamente lo hace hacia el norte que es donde menos se ha planificado el desarrollo de los servicios. El asfalto es un avance, pero si antes no se prioriza el acceso a los servicios, es obsoleto” expresaron.